Introducción.
De acuerdo con los datos presentados por el sitio del Observatorio de Complejidad Económica, OEC por sus siglas en inglés, México es el país con la economía número 14 en términos del PIB (US $ corrientes) en el mundo, básicamente su economía ha dependido de sus propios recursos naturales, de la riqueza que el suelo de esta gran nación ofrece como insumo para la industria moderna. Somos el país número uno en producción de plata, pero por el numero de dolares obtenidos en 2022 estas fueron las principales exportaciones de México: Coches ($48,4MM), Ordenadores ($39,3MM), Petróleo crudo ($38,2MM), Vehículos de motor; Piezas y accesorios (8701 a 8705) ($38,1MM), y Camiones de entrega ($29,1MM), exportando principalmente a Estados Unidos ($421MM), Canadá ($22,2MM), China ($12,7MM), Chinese Taipéi ($7,86MM), y Corea del Sur ($7,29MM).
En 2022, México fue el mayor exportador mundial de Camiones de entrega ($29,1MM), Cerveza ($5,95MM), Frutas tropicales ($3,9MM), Otras verduras ($3,24MM), y Tomates ($2,74MM), aunque es importante señalar que las exportaciones de los arubros tecnológicos, utilizan a México como ensamblador, pero no somos los beneficiarios del dividendo por tecnología, sólo por mano de obra barata, incluyendo que las principales cerveceras mexicanas hoy son propiedad de transnacionales, sólo los rubros en negritas, aportan las ganancias "enteras" realmente en México, el resto de dividendos llegan a los países donde se originan las industrias.
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| https://www.gob.mx/agricultura/es/articulos/principales-exportaciones-de-mexico |
En la industria y el comercio de los alimentos el aguacate y las frutas han sido nuestra gran divisa en el comercio internacional. Sin embargo no alcanzamos en México a partir de las decisiones tomadas en los años 80s la capacidad de generar riqueza a través de la industrialización de los recursos naturales. Se hacen esfuerzos por transformar el petróleo crudo en gasolina, se han generado algunas transformaciones de la madera, especialmente algunas maderas muy particulares de la región mexicana, nuestra exportación es principalmente en productos agropecuarios, por malas decisiones de gobernantes adheridos al neoliberalismo economico, nos "saco" de ser una exportación importante en la industria de la tranformación, especialmente de electrodomesticos, vehiculos y herramientas y maquinaria especializada en el campo, a solo exportar algunas frutas que han logrado el interés especialmente de los mercados europeos y los países orientales. Fuera de estos aspectos quizás, se me escape alguno, no he querido profundizar en ello, México no tiene industria de transformación que le permita ubicarse dentro de las muy rentables Naciones demandadas por el mercado internacional. No producimos autos, no producimos motocicletas, no producimos transportes de carga, tampoco producimos transportes ferroviarios, no producimos barcos, no producimos aviones, no producimos armas no producimos maquinaria industrial, ni para el campo, no producimos tecnología de informatica y comunicación, no producimos prácticamente nada. Sí usted que me lee, revisa su hogar, anote en una hoja cuántas de las cosas que usted posee en ese hogar, en esa casa son de manufactura nacional y se llevará la gran sorpresa de que al parecer ninguno.
¿Y es malo no producir lo que necesitamos y comprar todo desde el extranjero? podría ser que no, siempre y cuando, nuestra capacidad de producir riqueza, de producir dinero fuera superior a lo que generaría la industria de la transformación, a través de industrias de servicio, como por ejemplo el turismo, como sucede en Mónaco, o de la banca como sucede con Suiza, lamentablemente no es así, esto significa que de cada peso que nosotros obtenemos por producto de nuestro trabajo utilizaremos prácticamente el 90% para la adquisición de cosas objetos aparatos transportes que no se producen en nuestra nación y cuyas ganancias por tal producción, se depositarán en el extranjero, esto significa que por cada auto, televisión, motocicleta, computadora, que nosotros compramos estamos enriqueciendo a aquellas industrias, empresas y países desde donde se producen todos estos bienes de consumo. Luego entonces no somos un país que esté generando riqueza sino que más bien buscamos encontrar empleos, "trabajos" desde los que, con bajos salarios para nosotrsos, bajos costos para quien nos contrata, nosotros podamos obtener estos bienes de consumo que sangran terriblemente la economía del individuo, de la familia y de la nación, por esfuerzo que representa pagar todos los costos de procucción y las ganancias de quienes nos los venden. Nuestra "riqueza", producida por nuestro trabajo, va a parar, después de tener una doble ganancia, a aquellos propietarios de la industria en otros países que producen estos bienes de consumo pero que al mismo tiempo nos utilizan como empleados para poder movilizarlos en el mercado con un bajo costo, como se observa, es muy muy comprometida nuestra postura en el mercado internacional.
El otro debate se encuentra en la definición del, ¿porque somos así? y ¿porque no empezamos una propuesta de nación generadora de riqueza por la vía de la industria? que es donde se encuentran las mejores ganancias. La administración que ha encabezado Andrés Manuel López Obrador ha propuesto utilizar el erario público, el dinero que pagamos en impuestos, para la generación de algunas empresas que por su forma y sus características estrategicas, son buenos negocios y son parte de la transformación de algunos recursos, uno de ellos es la "Refinería de Dos Bocas" en donde se intenta producir en estos últimos años, no solamente por el avance tecnológico sino por la urgencia de cambiar el uso de combustibles fósiles, para poder tener algunos dividendos en este poco tiempo que nos queda producto de la extracción de un recurso natural que México tiene que es el petróleo y que podría ser transformado dentro de la industria de la refinación de insumos fósiles y que quizás un poco más adelante pudiera México entrar también en la industria de la transformación del petróleo al área llamada de petroquímica que implica el uso de estos fósiles para la producción de otro tipo de productos tales como los plásticos, en ambos casos, tanto los combustibles, como los plásticos derivados del petróleo, se han convertido en un gran industria productora de riqueza pero también en un gran dolor de cabeza para la humanidad, ya que el utilizar estos recursos ha implicado una serie de acumulaciones nocivas de los residuos, tanto de la combustión de los combustibles, de la quema de los combustibles, como del uso de la industria petroquímica, sus residuos han contaminado severamente la superficie terrestre, la superficie y el fondo Marino, especialmente tierra adentro, cuyos residuos van a los flujos pluviales que cada región, cada país tiene, y que debido a los temporales que cada año van movilizándo, hasta llegar al mar, estos dos problemas son justo uno de los temas más importantes a nivel global, el esfuerzo de quienes estudian estas consecuencias del uso del petróleo, nos han "invitado" a concluir que debemos dejar ya, de utilizar el petróleo tanto para la generación de combustibles como para la generación de otros insumos y de otros bienes de consumo derivados del petróleo. Aún va a transcurrir un tiempo, hasta encontrar soluciones en este espacio de tiempo en el que el ser humano irá razonando y buscando nuevos materiales para eliminar el uso del petróleo. Mientras esto se resuelve, el "mercado de consumos" internacional sigue solicitando la prestación de algunos servicios, es en esta demanda que el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha apostado, porque aún hay una enorme enorme industria derivada justamente de la transformación del petróleo y mientras encontramos soluciones se ha decidido participar en estos mercados para la producción de estos insumos, México se mueve aún en un 99% con vehiculos que usan combustibles fósiles.
Y el debate decía yo, justamente está entre quienes se proponen ser gobernantes, en el como México puede participar en esta economía mundial, buscando ser parte de los transformadores, de aquellos aventureros que toman un pedazo de piedra trabajan intensamente y lo transforman para darles valor agregado, transformar el petróleo transformar los metales, los minerales y mandarlos hacia el extranjero a la demanda del mercado internacional para obtener las ganancias, las grandes ganancias que de ello deriva, muchos países han producido una enorme cultura sobre la empresa, este emprendurismo llama a que los individuos de una nación se arriesguen a instalar lugares de transformación de la materia prima, en México no hay muchos, comparado con otros países, podríamos decir que nuestra industria de la transformación no existe, más bien somos un país que ofrece insumos "baratos" a quienes están transformando materia prima, y luego somos "empleados" para dar los últimos detalles en el proceso de transformación de las materias primas, enviamos acero a China, ahí lo transforman en pequeñas piezas que integran una motocicleta, que reqgresan a México para ser armadas por los "empleados" de bajo costo. En Estados Unidos hacen las computadoras y la industria mexicana ofrece a bajo costo, ensamblar, armar todas sus piezas y convertirlas en "producto terminado", ensamblamos máquinas en "plantas de ensamble mexicanas" donde le es mucho más rentable a los propietarios, que armarlas en su propio país. Por ejemplo en Estados Unidos el costo trabajo-hora de una persona obrera es entre 13 y 20 dolares, esto es significa 250.00 pesos mexicanos la hora, mientras que en México se paga a $250 el día de 8 horas, esto implica que cada hora mexicana tiene un costo 8 veces más económico que el costo de la hora de trabajo americana, por esta razón es que quienes empiezan a transformar materia prima en el extranjero, Estados Unidos, China, Francia, Inglaterra, India, terminan el proceso de integración de su tecnología, de sus computadoras, de sus herramientas, de sus transportes, des sus electrodomésticos en México y por ello encontramos empresas, plantas ensambladoras, como Volkswagen donde no se hace el auto solo se ensambla, empresas de motos como Dinamo, yo felicito mucho a la propietaria de Motocicletas Dinamo, es un ejemplo nacional, pero que al final de cuentas no es de una producción nacional, sino más bien es de un terminado, de un ensamblaje de las partes que son producidas en otra nación, porque es más barato ensamblar aquí, que ensamblar allá, esta política de ofrecer, de parte de México, este servicio de "mano de obra barata", es el que nos ha estado sangrando en los últimos años, para ser más precisos, de la década de los 80s hasta nuestros días, 40 años nosotros nos hemos ofrecido como "mano de obra barata", o más bien, quiénes nos han gobernado nos han ofrecido como "mano de obra barata" para poder aumentar las ganancias de las industrias extranjeras y mantener una debilidad económica necesaria, para los países líderes en el mercado internacional.
Ubiquémonos en el contexto, México es uno de esos países débiles en este concierto de países integrados en un mercado llamado "mercado internacional", nuestra debilidad económica nos ubica en la necesidad de buscar "empleo" para los habitantes de nuestro país, a la falta de producción de riqueza de industria de la transformación, pues nos hemos ubicado como ofertantes de nuestra "mano de obra" de nuestra "fuerza de transformación", sin embargo en estos últimos años se ha iniciado una fuerte tendencia, a resolver esta necesidad contenida, que nos impulsa a dejar de ser esta "mano de obra barata" y poder aspirar a ser "trabajadores de una industria propia" que tenga mayores dividendos y que por ende nos ofrezca mejores ganancias, mejores salarios.
Hasta finales de los 80s, México tenía grandes empresas del estado, todas fueron vendidas, rematadas, desarticuladas, con el propósito de ofrecer a la inversión extranjera poca competencia, la incompetencia en la transformación fue la moneda de cambio de quienes nos gobernaron, les pareció una mejor estrategia, traer a los inversionistas que se instalaron aquí, y que obtuvieron nuestro trabajo para la transformación de sus productos a bajo costo y que ellos, los gobernantes, pudieran aumentar sus riquezas en una maniobra"corrupta" de ofrecer recursos naturales y mano de obra barata a inversionistas a cambio de "pagos", "favores" y hasta "salarios futuros" en las empresas extranjeras. A esta estrategia política se le llama la "cultura del trabajo" o "cultura del empleo" y tiene toda una estructura de política nacional empezando por la "educación para el trabajo", esta educación para el trabajo implica educarnos desde pequeños para entender que somos una pieza sino importante por lo menos necesaria a veces para que funcionen las industrias de los inversionistas extranjeros obvio que esto nos dejó en franca desventaja no solo económica sino también social, se generaron enormes diferencias entre el que tiene, el que es propietario de las industrias y el que solo puede ofrecer su mano de obra y por ello el salario en México se debilitó a partir de 1988 con la llegada de Carlos Salinas de Gortari y la destrucción de la industria estatal, de las empresas del estado, que ofrecían muy buenos salarios y las mejores prestaciones sociales que había en esos momentos en el país, esta estrategia de debilitar no solo la competencia de las industrias mexicanas contra las extranjeras, no terminaba ahí sino también había que generar una debilidad económica y debilidad moral y psicológica en el trabajador mexicano para aceptar las condiciones a veces inhumanas muy injustas que se ofrecían por parte de los inversionistas extranjeros y que llevaron justo a estas enormes desigualdades sociales que hoy vivimos.
La cuarta transformación justo en eso fundamenta su propuesta, no solo se trata del cambio del poder político no se trata de iniciar un proceso de recuperación de nuestra capacidad para generar industrias de transformación que son las que acarrean mejores ganancias en el mercado internacional si tenemos plata somos el país número uno en exportación de plata bueno yo me preguntaría y quiénes son los beneficiarios de esas ganancias y dónde está la ganancia de la plata es cierto que probablemente la mayoría de propietarios de minas y de industrias que fundamentan su tarea en la transformación de la plata no son nacionales esto evidencia que la entrega de estas concesiones para la explotación de este recurso el más importante de nuestro país pues no han acarreado más que el beneficio a quien lo otorgó, probablemente un presidente y alguna camarilla de sus cuates conocedores de el negocio y que sean quienes viven en el extranjero los grandes ganadores, los grandes beneficiarios de la transformación de uno de los más importantes recursos, el número uno de México que es la plata.
Por supuesto que es justo la lucha por estos dividendos lo que va a llevar a México a la transformación no solamente de las formas del poder público y político sino también se busca transformar los esquemas de economía de negocios que en México unos cuantos corruptos se han encargado de construir, o más bien de deconstruir en los últimos 40 años a partir de Carlos Salinas de Gortari. Esta nueva estructura social no se construirá de la noche a la mañana, serán muchos años en los que poco a poco y con las decisiones adecuadas logremos alentar una industria nacional que pueda ir participando en el mercado internacional con las mejores ventajas posibles, el millón de hectáreas que cada año se ha estado estableciéndo como meta por parte del presidente de la República para reforestar lo que en los últimos 100 años deforestamos, y que arrojará dividendos quizás en 20 años más, las maderas antes muy cotizadas, que la naturaleza ofrece en este en nuestro país serán probablemente otro insumo, otro recurso de México, pero es necesario comprender que no se trata de destruir sin volver atrás, sino que tenemos que buscar los mecanismos para esta continua circulación de la producción y la explotación para que los recursos no se agoten y que quedemos nuevamente, en estado de indefensión económica, es muy importante comprender que México aún tiene muchos pero muchos recursos naturales que podremos ofrecer a la industria de la transformación pero que si seguimos manteniendo el estado en el que se explotaron nuestros recursos en los últimos 40 años, bueno no seremos nosotros los beneficiarios de la riqueza producida por los recursos de nuestra propia tierra, serían los extranjeros los mejores beneficiados y a nosotros solo nos quedaría como el domingo pasado se dijo en pasta de Conchos carne de cañón y números de alta o baja en la producción de recursos con poco interés en el valor humano, este valor humano es justo donde arranca la cuarta transformación y de ello no se ha hablado mucho y por eso a partir de esta introducción empezaremos a abordarlo en el primer capítulo, es justo el proceso de la integración y permanente perfeccionamiento del humanismo mexicano que demos todos, pautas a las construcciones económicas y sociales del México que ya empezamos a vivir, el de la CuartaTransformación.
